¿Cómo puede afectar el distanciamiento social al futuro del transporte aéreo?

El sector de la aviación está sufriendo una crisis financiera sin precedentes debido a la pandemia de COVID-19. Ahora mismo, lo único claro es que el transporte aéreo no va a ser como antes en un futuro inmediato. Ante el temor de una segunda oleada de propagación del virus y el miedo a quedarse atrapado en otro país, los expertos del sector prevén que la demanda de viajes no se recupere en los próximos años. La cuestión que deben abordar las compañías aéreas de inmediato es el cumplimiento de las medidas de distanciamiento social en los aviones y los aeropuertos. Actualmente, los aviones están volando a la mitad de su capacidad y las tiendas libres de impuestos en los aeropuertos permanecen cerradas. Esto hace que nos planteemos qué depara el futuro cercano al sector de la aviación.

El impacto del distanciamiento social en el futuro del transporte aéreo

Las aerolíneas tienen que afrontar el reto que supone ganar la confianza de los pasajeros. A muchas personas les preocupa poder mantener una distancia adecuada con el resto de pasajeros. Los gobiernos y las compañías aéreas deberán efectuar los preparativos oportunos cuando se levanten los cierres por la pandemia de COVID-19. Deberán establecer restricciones para garantizar que los pasajeros no corran el riesgo de contraer el virus o de propagarlo. Todas las compañías aéreas deberán seguir unas directrices hasta que la Organización Mundial de la Salud transmita una señal clara. Esto debería durar varios meses, ya que por el momento no se dispone de ninguna vacuna contra el COVID-19.

Medidas propuestas en aeropuertos y aviones

• Mantener una distancia mínima de dos metros en aeropuertos y aviones

• Usar mascarillas

• Desinfectar aeropuertos y aviones

• Bloquear o suprimir los asientos centrales

Se pueden bloquear o suprimir los asientos centrales para evitar que los pasajeros se sienten unos al lado de otros. Muchas aerolíneas están barajando esta idea, pues favorece el distanciamiento social y es algo que los viajeros apreciarán. Lo preocupante es que no se sabe si esta medida ayudará realmente a mantener una distancia adecuada. Tampoco existen pruebas ni garantías de que al dejar un asiento central vacío se evite que los pasajeros propaguen el virus durante el vuelo. Otra preocupación es si se trata de una opción realista en lo que a los ingresos de las aerolíneas se refiere. Brian Pearce, economista jefe de la IATA, ya señaló que muchas aerolíneas no podrían operar vuelos con el distanciamiento social impuesto a bordo manteniendo los precios actuales. Se estima que las aerolíneas tendrían que aumentar sus tarifas hasta un 54% con estas medidas de distanciamiento para seguir siendo económicamente viables.

Una medida adicional de distanciamiento social es que las aerolíneas minimicen sus servicios a bordo. De este modo, se puede evitar un contacto cercano entre la tripulación de cabina y los pasajeros. Las aerolíneas podrían dejar preparada la comida preenvasada en los asientos antes de embarcar. Algunas aerolíneas pueden animar a los pasajeros a que lleven su propia comida. En Estados Unidos, algunas aerolíneas ofrecen bolsas de comida para llevar en la zona de embarque y botellas de agua en lugar de su habitual oferta de bebidas a bordo. A la hora de embarcar, solamente se permitirán tres filas a la vez para evitar que se formen colas cerca de las puertas de embarque y en el finger. Los aeropuertos deben garantizar una distancia de dos metros en el mostrador de facturación y en los controles de seguridad.

Ideas innovadoras para el futuro del transporte aéreo

Aviointeriors, una compañía aérea italiana, está imaginando nuevas propuestas para las aerolíneas. Esta compañía está cambiando la forma de diseñar sus productos pasando del objetivo de colocar el mayor número de asientos posible en un avión a proponer nuevas opciones para mantener la distancia social en los asientos de clase turista. El objetivo es separar a los pasajeros lo máximo posible manteniendo unos niveles de capacidad que resulten rentables. Una de las ideas son los asientos “Glassafe”. Estos asientos van equipados con unas mamparas que actúan como barrera frente a los gérmenes. Otra propuesta son los asientos “Janus”, que se colocan de tres en tres. El asiento central está orientado hacia atrás y todos los asientos disponen de un escudo transparente. De esta manera se puede mantener la distancia entre los tres asientos en el menor espacio posible.

Demanda de jets privados

La demanda de vuelos en jet privados se dispara a medida que los viajeros desean minimizar su exposición a los demás. Si se puede permitir volar en un jet privado, no se lo piense más. Además del tiempo que gana, evitará los aeropuertos abarrotados y las largas colas en los mostradores de facturación, además de reducir considerablemente el riesgo de contraer el virus durante el vuelo. 

El sector de la aviación tal y como lo conocemos va a tardar en volver. A medida que las aerolíneas adopten nuevas medidas de distanciamiento social, viajar va a ser cada vez más complicado. Air Charter Service ofrece chárteres privados para viajes de negocios o de placer. Viaje en nuestros lujosos aviones mundialmente conocidos y pregúntenos por nuestras ofertas de chárteres privados, como los vuelos Empty Legs.